Introducción
Instagram es la red social que más crecimiento tuvo en los últimos tiempos y como era de esperarse, las marcas y negocios de todo tipo no tardaron en dar el paso a publicitarse en ella. De hecho, durante 2017, más del 70% de las empresas de Estados Unidos ya contaban con presencia en esta plataforma y desde ese momento y a nivel global, es número no paró de crecer.
Aunque otras formas de tener presencia digital no dejaron de ser relevantes ante esta nueva competencia, Instagram es probablemente la que tiene una amplitud mayor en cuanto a edades a las que se puede alcanzar y con la integración de funcionalidades nuevas, tanto para usuarios como para empresas, se volvió infaltable en cualquier estrategia.
Ya sé: estas estadísticas pueden ser un poco abrumadoras si llegaste un poco tarde a esta movida o si aunque venís tratando, no lográs superar los seguidores de tus sobrinos pero tranquilo: la competencia no tiene que intimidarte, especialmente si conocés sus mejores prácticas para sumar followers y eso es lo que vamos a ver justamente ahora.
1. Tener un prometedor feed profesional
Primero lo primero: el feed (la forma coqueta y profesional de decirle al perfil) es la base de cualquier cuenta de Instagram y lo que mayor cantidad de seguidores puede traer a una cuenta ya sea personal o profesional.
Para generarlo, lo mejor es no ir improvisando día a día que fotos subir sino definir de antemano qué es lo que se quiere comunicar, y cómo. Elegir una paleta de colores para tener una guía en cada contenido va a contribuir a que el feed sea armónico e interesante.
Hagas lo que hagas, evitá imágenes de banco que no transmitan nada o subir fotos por el simple hecho de subir algo. Si bien es importante que las publicaciones tengan cierta periodicidad, es mucho más dañino llenar el perfil de contenido no relevante. La versión digital de “si no tenés nada bueno para decir, no digas nada.”
2. Instagram es belleza: utiliza imágenes de calidad
Cuando pensamos en Instagram todos tenemos una cierta imagen en la cabeza de cómo lucen las cosas y no es casualidad: fue pensada como un álbum de fotos estéticamente bello, y la plataforma da las herramientas para que así sea (como los adictivos filtros que logran que casi cualquier lugar se vuelva inspiracional).
No es necesario replicar las fotos típicas como el vaso de café para llevar, las playas paradisíacas y las personas bonitas que solemos ver para estar en este parámetro, sino asegurarnos que sean imágenes de alta calidad, en buena definición y que ayuden a componer la imagen de marca que queremos dar a nuestros clientes.
3. Coloca una descripción larga e interesante
Los hashtags son importantísimos en el ecosistema de Instagram, pero de eso vamos a hablar en un toque.
La descripción tanto del perfil como de cada imagen tiene que sumar algo y no estar caprichosamente: si bien muchos primeros usuarios se inclinaron a la práctica de sumar cualquier hashtag que tenga buena tracción de usuarios, no es eficiente ni demuestra el conocimiento que tenemos sobre cómo usar esta red social. Pero pará, si la base es la imagen, ¿para qué quiero describirla? Seguí leyendo.
4. Agregá valor a cada imagen
Una imagen vale más que mil palabras, pero si algunas correctas la acompañan lo único que hará es hacerla más interesante.
Es importante definir qué queremos contar, vender o a quién apuntamos para que las descripciones no sean un estorbo sino todo lo contrario, pero considerando siempre que no todos los usuarios pueden tener la misma interpretación sobre las fotos y a veces un poco de contexto y aclaración no está nada de más.
5. Utiliza hashtags y palabras claves
Ahora sí, llegamos a los hashtags: esas palabras claves enunciadas con un numeral por las cuales se puede filtrar contenido similar y que responda a un criterio que facilite la búsqueda.
Por ejemplo, si se trata de un negocio de marketing digital que se está publicitando via Instagram, hay que buscar las palabras correctas que acompañen la búsqueda ya sea por servicios, productos y hasta el nombre de la empresa.
Los hashtags son sumamente útiles para lanzar o acompañar campañas globales como el Hot Sale ya que permiten que más personas lleguen a nuestro perfil por medio de un concepto que las unifica a todas.
Entre 5 y 10 hashtags son suficientes
Antes de enloquecer con la cantidad de hashtags, calma: sumar cincuenta hashtags no es más útil que elegir entre cinco y diez que sean los indicados para lo que queremos atraer.
Un poco de investigación previa sobre área de industria y marcas similares es de mucha ayuda para evitar caer en la tentación de cebarse con miles de hashtags que en realidad lo único que logran es confundir a la audiencia.
6. Publicá una o dos veces al día
Hablamos de elegir bien qué queremos decir y es por eso que para las marcas es fundamental tener algún tipo de calendario de contenido interesante armado de antemano, porque se recomienda publicar una o dos veces al día para lograr una presencia fuerte.
Lo mejor es pensar qué tipo de estrategia, productos, servicios y contenidos queremos destacar para poder mantener la calidad del feed sin sacrificar la cantidad de publicaciones que hacemos.
7. Elegí los horarios de publicación que mejor funcionan
Hay horarios que tienen mayor visibilidad que otros. ¿Sirve publicar en cualquier momento? No tanto como postear cuando hay más personas mirando. Las 10 am o las 18 pm suelen ser horarios que funcionan mucho mejor en las redes si lo que buscas es entretener, aunque hay casos que conviene publicar a la noche si tu negocio se basa en delivery de comida y es otro motivo por el cual calendarizar qué vas a postear y cuándo es una pata fundamental de Instagram si lo que buscás es ampliar la base de seguidores (y posibles clientes).
8. Seguíme, ¿te sigo?
Desde las épocas del fotolog que el seguir gente para que te sigan funciona y en Instagram esto no cambió: seguir cuentas para llamar su atención y buscar que te sigan es una buena práctica.
Ojo, no mandes mensajes directos pidiéndolo ni llenes de spam a los usuarios porque lo único que vas a lograr es ahuyentarlos. Un follow de “estoy acá, existo” es más que suficiente pero para que Instagram no te corte las alas, no lo hagas con más de treinta personas por hora o te van a declarar usuario no grato y bloquearte la función por un buen rato.
9. Genera interacción con los usuarios
La dinámica de las redes sociales está enfocada en la conversación y la posibilidad de generar una comunidad, estar disponible, escuchar a las personas y ser accesible para la comunicación.
Un artículo que publicamos explica excelente como es la dinámica
Esto tiene dos patas fundamentales:
Contestar los mensajes
Responder los mensajes directos y en los posteos muestra real presencia mucho más allá de la publicación en sí, ayuda a concretar oportunidades de negocio y a fortalecer la percepción de marca.
Un community manager que pueda llevar un buen ritmo de respuesta es una inversión que puede tener un gran efecto. Si no contestas, lo más probable es que tus seguidores se sientan ignorados, dejen de interesarse en tu marca y eventualmente, te claven el temido unfollow.
Invitar a participar
Un llamado a la acción en las publicaciones es una buena manera de romper el hielo con tus usuarios.
Hacé alguna pregunta que invite a que dejen sus respuestas y no sólo vas a atraer más personas (a las cuales les van a aparecer los comentarios de sus conocidos en tu perfil) sino que vas a poder sacar insights que para tu estrategia tanto en esta plataforma como en otras, es sumamente valiosa.
¿A cuántos seguidores querés llegar y con cuáles de estos consejos vas a empezar a conseguirlos?