Introducción
El mundo digital tiene muchísimas posibilidades para aquellas personas y empresas que buscan crecer. De hecho, es prácticamente imposible hacerlo en el mundo que vivimos actualmente a menos que contemos con una presencia online. Hay muchos consejos sobre todo lo que hay que hacer si queremos ir por el camino del éxito en cuanto a estrategias, prácticas de marketing y hasta actitudes para encarar procesos, pero pocas veces hablamos de los errores.
No quiero ponerme filosófico, pero no hay forma de evitar los errores que no sea conociéndolos a fondo. Evitar los lugares comunes donde muchos proyectos hacen agua y lamentablemente, frenan el despegue de su potencial es tan efectivo como una buena práctica, así que vamos a contarte diez errores bastante comunes que es ideal evitar para que tu crecimiento deje de ser un objetivo y se convierta en una realidad…incluso antes de lo que creerías.
No tener en cuenta a los usuarios mobile
La transformación digital cambió completamente las formas de trabajar, vender y comunicarnos que conocíamos en la era pre-Internet. Hoy por hoy no nos imaginamos anunciando nuestros servicios en la guía de teléfonos ni como vendedores puerta a puerta, ¿no? Usamos la tecnología que tenemos para alcanzar a cada vez más personas pero, ¿qué pasa si ignoramos cómo se comportan y consumen la información esas personas? Muchos creen que la presencia digital tiene un teclado y un mouse y con eso basta pero los usuarios mobile son a quienes hay que considerar cada vez más.
No incluir un Blog en tu sitio
Un blog no sólo aporta mucho al branding de un sitio, sino que también es un gran aliado a la hora de poner en práctica estrategias SEO para atraer a una mayor audiencia a tu marca. Los blogs funcionan no sólo para empresas sino para personas ya que pueden ser un gran apoyo para los consumidores mientras que, a la par, nos muestran como referentes de nuestra área de experiencia.
No utilizar Redes Sociales
No sólo se trata de tener redes sociales sino de poder aprovechar las funcionalidades de cada plataforma al máximo para que sean un complemento del resto de las campañas de marketing digital que hagamos. Siempre es preferible optar por perfiles profesionales, calendarizados y que acompañen el tono de nuestra marca. No es necesario tener presencia en absolutamente todas las redes sociales que se encuentran disponibles sino de estar en las que mayor alcance tengan para nuestros potenciales clientes y consumidores de la marca.
No segmentar tus campañas
Cualquier campaña, por más bien pensada que esté, no es completamente efectiva a menos que esté bien segmentada, es decir, apuntada a los sectores de audiencia que pueden estar interesados en lo que ofrecemos. De otra forma, la inversión de dinero y esfuerzos que usaremos tratando de llegar a todo el mundo…no llegará a ningún lado.
Tener un sitio web lento
El diseño UX es fundamental para que los sitios sean realmente funcionales a nuestros objetivos de visitas, clics o conversiones por venta. Si un sitio web no tiene un diseño lo suficientemente amigable o se vuelve excesivamente lento es muy probable que los usuarios se sientan frustrados a mitad del proceso y lo abandonen. El sitio web, además de ser visualmente atractivo para poder distinguirse ante la competencia, debe ser fácil de usar y lo suficientemente rápido para agilizar los procesos de venta.
No hacer un seguimiento de los carritos abandonados (ventas sin finalizar)
Muchos usuarios no completa el proceso de compra hasta llegar al final por diversos motivos: puede ser que el recorrido que tengan que hacer sea complejo, que el sitio no esté óptimo para ser navegado o que tenga demasiados pasos para su gusto. Otras veces es simplemente porque los usuarios cambian de opinión y deciden no comprar. Es fundamental poder trackear quienes son estas personas para poder apuntar las campañas a ellos e incentivarlos a completarlas. Te sorprendería cuántos están dispuestos a hacerlo y convertirse en clientes.
No realizar implementaciones SEO
Más allá de que las campañas de marketing digital hayan avanzado mucho en los últimos años y siempre haya cosas nuevas por probar, las estrategias de posicionamiento SEO son algunas de las más exitosas a largo plazo y son ideales para complementar cualquier otra acción que se esté llevando a cabo. Aunque sus resultados tal vez no sean tan inmediatos como otros procesos, son una buena inversión de tiempo y dinero.
No tener en cuenta el Email Marketing en tu estrategia digital
El email marketing tiene mala prensa pero si se realiza correctamente, es sumamente útil y puede ser un enorme diferencial en un negocio. Opciones como newsletters pueden ser una gran forma de no sólo fidelizar clientes sino de acercar promociones, descuentos y lanzamientos de una manera personalizada y que acompañe el valor agregado de acercar información relevante para quien lo reciba. Como si esto fuera poco, es una de las estrategias más versátiles y modificables según las necesidades cambiantes de cada negocio.
No incluir una llamada a la acción en tus campañas publicitarias
Los llamados a la acción son fundamentales para lograr que los usuarios lleven a cabo sus compras y para simplificar los procesos, pero también son una fuente inagotable de insights valiosos cuando los usamos como disparador de conversaciones en redes sociales y pedimos opiniones, que nos compartan experiencias y hasta son una ayuda para que nuevas personas nos conozcan cuando pedimos que etiqueten a alguien más. Recordá mantenerlos en un tono amigable y creativo para que no rompan con la comunicación general de tus contenidos, sino que lo acompañen.
Tratar de hacer todo solo/a
Tratar de llevar a cabo estrategias de marketing digital sin ayuda es tentador, pero es probablemente uno de los mayores errores que llevan a malas inversiones de tiempo y dinero. Un buen experto en el área podrá asesorarte en cuanto a qué pasos dar en una construcción de marca y estrategia de ventas a corto, mediano y largo plazo. Buscá la ayuda que puede salvarte de cometer estos diez errores que no te permiten crecer y da un paso más con tu negocio.
