Introducción

Hemos hablado del ecommerce en varias oportunidades pero la idea de imaginarte, lector, haciendo fuerza tratando de recordar qué era me parte el alma así que vamos a hacer un breve repaso: el ecommerce es la forma en la que se suele llamar al comercio electrónico, es decir, a la oferta y distribución de productos y servicios a través de plataformas online. Ahora, como buen comercio que es, lo que siempre estamos buscando es aumentar las ventas.

“No me interesa aumentar las ventas”, dijo nadie nunca y en realidad, aunque tu negocio esté funcionando bien la idea de no sólo aumentar los clientes sino la cantidad de transacciones comerciales que se hacen en tu sitio debería siempre ser algo a tener en cuenta. Esto ayuda, sobre todo, a las épocas donde la demanda baja ya sea por la época del año, fluctuaciones de la coyuntura económica o a veces, algo tan aleatorio como una mala racha. Sí, puede pasar y poder sortear esas épocas de poca abundancia en muchas ocasiones, es lo que logra que una empresa se mantenga a flote.

La realidad es que cuanto más previsoras sean las acciones que tomemos para asegurar un flujo de ventas que sea creciente y sostenido en el tiempo, mejores resultados vamos a poder obtener. Además (y esto no es un detalle menor) habla muy bien de una marca que se mantenga en constante expansión y no se quede con lo bueno conocido. Así que sin más preámbulos vamos a darte los datos que necesitas para que tu ecommerce sea todo lo que puede ser y tus ventas sigan creciendo.

Funcionalidad del sitio ante todo

Un sitio web tiene que tener un diseño estético atractivo y llamativo pero por sobre todas las cosas, tiene que ser funcional para los usuarios. Muchas experiencias de compra resultan poco satisfactorias por este motivo, y muchas compras no llegan a realizarse porque el usuario se siente perdido y lo suficientemente frustrado para dejar el proceso por la mitad y buscar una opción más rápida y sencilla. Tu sitio debe navegarse fácilmente y las personas tienen que poder encontrar rápidamente lo que buscan. Tiene que responder rápidamente y tener la facilidad de que con ingresar una palabra clave, puedan hallar el producto o servicio que les interesa sin mayores demoras e inconvenientes.

Coloca un buscador visible

Una de las maneras más efectivas de lograr que los usuarios no abandonen el sitio antes de concretar la compra es hacer el proceso lo más fácil para ellos posible. Aunque muchos puedan pasar horas husmeando en los catálogos digitales, la gran mayoría entra a las páginas con una necesidad clara de qué necesita y cuanto antes llegue a ello, más posibilidades hay de que compre. Si bien muchas plataformas traen un buscador integrado, siempre es mejor sumar uno interno que sea visible, con una caja de búsqueda notoria y un texto claro de indicación.

Regla de los 3 clics

La regla de los 3 clics es una de las máximas de la navegación de los sitios web y que tu página se alinee a ella puede ser altamente beneficioso. Sin embargo, no por ajustarse estrictamente a ella quedes con sub grupos demasiado amplios de información que pueden confundir a tus clientes pero esperá, no quiero que te confundas vos con esto. Vamos a ver bien de qué va.

¿En que consta la regla de los tres clics?

Básicamente, lo que propone es que los usuarios deberían poder acceder a la información de todo el sitio sin tener que hacer más de tres clics. La teoría detrás de esto es una realidad que seguro que como usuario vas a poder entender: si hay que hacer demasiados clics o pasar demasiado tiempo navegando para llegar a lo que necesitamos, vamos a abandonar la página sin completar una compra. Aunque no llegues a este ideal, este principio puede ayudarte a la hora de crear estructuras jerárquicas más sencillas y accesibles.

Incluí un call to action

Los call to action (o llamados a la acción) son aquellas frases que invitan al usuario a justamente, accionar. Puede ser tan directo como “¡Comprá ahora!” como un poco más creativo, pero lo importante es que estas frases no sean aleatorias sino que estén distribuidas estratégicamente para ir guiando el proceso. Incluí siempre un verbo que indique cómo seguir, armá frases entusiastas que le den ganas a la persona de llevar a cabo la acción y aprovechá el FOMO (Fear of missing out, conocido como “el miedo a perderse de algo”) para que la compra se concrete lo antes posible.

Describe detalladamente tu producto

Aunque uses buenas imágenes, siempre es importante acompañar con descripciones claras y precisas sobre los productos: precio, dimensiones, especificaciones. Sin la información necesaria el usuario puede desmotivarse o enviar una consulta que disminuye notablemente las posibilidades de terminar con la operación en el momento. Pensá como usuario: qué necesitas saber para tomar una decisión, y asegurate de que toda esa información esté a su alcance.

El precio debe estar destacado

Nada ahuyenta tanto a los clientes como no tener en claro una de las principales variantes que toman en cuenta para decidir si comprar o no. Sí, sin precio no hay compra porque por más sencillo que hayas hecho tu recorrido en la navegación. Los precios tienen que estar destacados al igual que los descuentos y ofertas especiales para que hacer la compra en el momento sea más una necesidad para ellos que una opción a considerar.

Procesos de compra optimizados

Además de facilitar la exploración del sitio, es fundamental contar con procesos de compra optimizados para que las transacciones tanto económicas como de logística y distribución de envíos funcionen siempre correctamente y sean simples de realizar. Poder entregar los productos en tiempo y forma es una de las formas de derribar la virtualidad del ecommerce y hacer que sea satisfactorio para los clientes. Un cliente que recibió un buen servicio es más propenso a volver a comprar en el mismo lugar y recomendarlo antes de aventurarse a una opción desconocida que ofrezca la competencia.

Ofrece formas de pago seguras y conocidas por los usuarios

Asesorate para poder ofrecer formas de pago seguras y conocidas. Tener transparencia con respecto al uso de datos en información tan sensible como la relacionada a tarjetas de crédito es la base de la confianza de los clientes. Opciones de pago electrónico como MercadoPago son muy buenas para los sitios de ecommerce ya que centralizan diferentes métodos de pago a través de una herramienta que a la mayoría de los usuarios les resulta familiar, confiable y fácil de usar.

No esperes más: optimizá tu ecommerce y seguí aumentando tus ingresos.